EL PELIGRO DEL AMIANTO

La Aluminosis es un peligro que algunas personas tienen o han tenido en sus propias casas. Pero un peligro mucho mayor, el cual prácticamente todos hemos sufrido en nuestras propias viviendas es el Amianto. ¿Qué es el Amianto, para qué se utilizaba y dónde se encuentra? y lo más importante. ¿Qué peligro tiene?. El Amianto, también conocido como asbesto es el nombre de un grupo de minerales metamórficos y fibrosos. Están compuestos de silicatos de cadena doble. Los minerales de asbesto tienen fibras largas y resistentes que se pueden separar y son de gran flexibilidad como para ser entrelazadas.

También resisten a temperaturas extremadamente altas. Debido a todas estas características, el asbesto se ha usado en una gran variedad de productos. Las excelentes propiedades que presenta el amianto (aislantes, mecánicas, químicas y de resistencia al calor ) y su relativo bajo coste, pueden explicar sus numerosas aplicaciones industriales, así como el hecho de que figure, durante muchos años, en la composición de muchísimos productos o acabados industriales.

Fue en el año 1906, en Inglaterra, cuando fue descrito el primer caso conocido de "fibrosis pulmonar por asbesto" en una trabajadora de 33 años de edad, del área de cardado de una fábrica textil. En el año 1935 se conocen los primeros trabajos médicos que relacionan científicamente la exposición al asbesto y cáncer de pulmón. En el año 1947 se describen los mesoteliomas de pleura y peritoneo, y hoy día se reconoce que el amianto es la más conocida de las sustancias industriales relacionadas con el cáncer de pulmón.. El cáncer de pulmón en trabajadores expuestos llega a ser hasta 20 veces más frecuente que en la población general. Hay tres tipos de cáncer producidos por exposición al amianto: asbestosis, cáncer del pulmón y mesotelioma. El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte relacionada con el amianto en los pacientes expuestos. Todas las fibras de amianto pueden causar cáncer, aunque la crocidolita (El amianto azul) es la más cancerígena de todas y por tanto, las más dañinas en los trabajos con amianto. Se cree que el amianto actúa como un cocarcinógeno junto al tabaco, cuya inducción de cáncer de pulmón es bien conocida. El cáncer de pulmón es una enfermedad con un período de latencia prolongado. Las manifestaciones clínicas del cáncer de pulmón incluyen la pérdida del apetito y de peso, el cansancio, el dolor torácico, la hemoptisis o expectoración de sangre y la dificultad respiratoria.

El mesotelioma maligno es el cáncer de la célula mesotelial, y afecta a la pleura y al peritoneo en el 80% de los casos. Se suele producir en personas que han realizado a trabajos con amianto al menos 35 años antes, aunque en algunos casos se ha desarrollado en personas con escasas exposiciones.

La asbestosis es una enfermedad pulmonar, crónica, producida por la inhalación de fibras de amianto. Las fibras penetran en los pulmones e irritan el tejido pulmonar, lo inflaman y provocan, a cabo de unos años, una fibrosis pulmonar (engrosamiento y cicatrización del tejido pulmonar). Puede pasar mucho tiempo (25 años o más) entre la exposición a las fibras de amianto y el comienzo de la enfermedad y los síntomas.

En el año 1980 las autoridades médicas demostraron que los productos relacionados con el asbesto/amianto provocan cáncer con una elevada mortalidad. Pero no fue hasta la década del 2000 que empezó a prohibirse en los países desarrollados y su uso quedó totalmente prohibido en la Unión Europea desde principios del 2005. La propia Comisión Europea habla de una gran epidemia de 500.000 muertes en los próximos años. Pero... si se conocía su peligro desde el año 1906 ¿por qué se continuó utilizando hasta el año 2000?. Esto demuestra que al igual que la Aluminosis, el Amianto fue otro fraude del cual se sabía muy bien sus riesgos y el peligro que suponía para nuestra salud.

El Amianto se ha utilizado masivamente en diversos sectores: como material de construcción en baldosas, tejas, azulejos, cementos; en la fabricación y reparación de automóviles, camiones (embragues, frenos, juntas o componentes de la transmisión); en la fabricación, reparación y mantenimiento de materiales de trenes; en la construcción naval, reparación y desguaces de barcos; en la siderurgia; en el sector eléctrico (centrales térmicas y nucleares) y algunos materiales textiles, envases o revestimientos.El Amianto se refleja en fibras presentes en las placas onduladas de fibrocemento que componen multitud de cubiertas de naves y edificios en España desde 1950-1990. Debido a sus características aerodinámicas, pequeño tamaño y forma alargada, pueden permanecer en suspensión en el aire el tiempo suficiente para que representen un riesgo respiratorio. Igualmente, pueden adherirse fácilmente a la ropa y a la piel y desprenderse posteriormente con el consiguiente riesgo de inhalación.

De esta manera, si el contacto con el Amianto o Asbestos es reducido, apenas existe riesgo para la salud. En cambio, el peligro aparece con un contacto frecuentemente con el Amianto pues aumenta el riesgo de que pasen fibras respirables al aire durante los trabajos con materiales que contienen el Amianto como son las placas de fibrocemento (Uralita). En trabajos de derribos y mantenimiento, los trabajadores siempre deben llevar "Equipos de Protección Individual" (trajes tipo Ébola) debido a su exposición.Las tuberías de las bajantes de muchos de los edificios españoles son de fibrocemento. También muchos desagües de aguas. Para la fabricación del fibrocemento, originalmente se utilizaba el amianto como fibra de refuerzo, pero cuando salieron a la luz los problemas de asbestosis que éste provocaba, se fue abandonando paulatinamente su uso en los distintos países. Se ha intentado sustituir el asbesto por otros tipos de fibras, como fibras de celulosa, fibra de vidrio o fibras vinílicas, pero esta sustitución sólo ha tenido un éxito parcial. Sin embargo, los tubos de todo tipo, que se fabricaban mediante centrifugado del material, no han logrado ser reproducidos con celulosa, por lo que ha debido abandonarse su uso.

El fibrocemento se puede usar en la construcción de los siguientes elementos: tubos para agua de riego o abastecimiento de agua potable, tubos para drenaje o alcantarillado, depósitos de almacenamiento de agua de muy pequeño tamaño y chimeneas Ahora ya estamos más informados de los peligros de este mineral. El Amianto, un material que nos hemos encontrado en algún momento de nuestra vida, por culpa de algunos desaprensivos que sabían muy bien su peligrosidad para nuestra salud y se callaron para lucrarse.

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